Un siervo fiel con corazón misionero
El Pastor Jerry Collins es un hombre que ha dedicado su vida entera a servir a Dios, amar a las almas y levantar obreros para la obra del Señor. Su historia es un hermoso testimonio de fe, perseverancia y amor por las misiones. Hoy sirve como pastor del ministerio hispano en la Iglesia Bautista de Lancaster, California, bajo el liderazgo del Pastor Paul Chappell.
El hermano Collins creció en un hogar cristiano donde aprendió desde joven a caminar con Dios. Su vida devocional fue marcada por la lectura diaria de la Biblia y la oración constante. Con el tiempo, el Señor lo llamó al ministerio y lo unió en matrimonio con la hermana Marta Collins, una mujer de fe y compañera inseparable en el servicio a Cristo. Dios les concedió cuatro hijos: Christopher, Jennifer, Daniel y Ángela, quienes fueron testigos del amor, entrega y sacrificio de sus padres por las almas.
Desde los primeros años de su matrimonio, el Pastor Collins y su esposa respondieron con gozo al llamado misionero. Iniciaron su ministerio en Chihuahua, México, donde comenzaron a plantar iglesias y compartir el Evangelio con pasión. Más adelante, el Señor los dirigió a Los Mochis, Sinaloa, donde fundaron un ministerio fundamental llamado “Escuela de las Escrituras”. Allí imprimieron y distribuyeron más de siete toneladas de Biblias y materiales bíblicos, poniendo la Palabra de Dios en las manos de miles de personas. Su visión era clara: que cada alma tuviera acceso a la verdad de las Escrituras.
Con el tiempo, Dios los guió al norte, a El Paso, Texas, un lugar estratégico en la frontera entre México y Estados Unidos. Allí colaboraron con una iglesia bautista local y un proyecto conocido como “El Puente del Paso”, alcanzando a familias migrantes con el mensaje del Evangelio. A lo largo de más de tres décadas de ministerio, el Pastor Collins ha plantado y fortalecido iglesias en ambos lados de la frontera, siempre con la meta de levantar líderes nacionales y dejar ministerios autosuficientes.
En el año 2018, el Señor los condujo al Valle del Antílope en California, donde se encuentra la Iglesia Bautista de Lancaster, reconocida por su visión misionera mundial y su amor por las almas. Allí, el Pastor Collins se unió al equipo pastoral como pastor del ministerio hispano, sirviendo hombro a hombro con el Pastor Paul Chappell. Bajo su liderazgo, el ministerio hispano ha crecido en alcance, discipulado y amor por las misiones. Su corazón por los pastores, misioneros y familias ministeriales ha sido una gran bendición para muchos dentro y fuera de la iglesia.
A lo largo de su vida ministerial, el Pastor Collins ha visto la mano de Dios obrar de formas milagrosas: personas salvas, vidas restauradas, provisión divina en tiempos difíciles y una fidelidad constante del Señor. Sin embargo, su camino también ha estado marcado por pruebas profundas. En un corto periodo de tiempo enfrentó la partida de su hijo Daniel, luego la de su padre y finalmente la de su amada esposa Marta. A pesar del dolor, su fe no flaqueó. Continuó predicando, cantando, sonriendo y animando a otros a confiar en el Dios que nunca falla. Su testimonio es un recordatorio vivo de que la gracia de Dios es suficiente en toda circunstancia.
Tiempo después, Dios en Su bondad permitió que el Pastor Collins encontrara nuevamente compañía y consuelo en su matrimonio con Georgina, con quien comparte hoy su vida y ministerio. Juntos continúan sirviendo al Señor con gozo, fortaleciendo la iglesia local y apoyando la obra misionera alrededor del mundo.
Quienes lo conocen lo describen como un hombre humilde, generoso y lleno de amor. Su espíritu dadivoso ha sido una constante: siempre buscando ayudar a otros, sostener ministerios, apoyar a misioneros y suplir necesidades sin esperar nada a cambio. Ama profundamente las misiones y ha sido un ejemplo de mayordomía cristiana, invirtiendo su vida, tiempo y recursos en lo que tiene valor eterno.
Hoy, desde su posición en Lancaster, el Pastor Jerry Collins continúa formando obreros, predicando la Palabra, aconsejando a pastores jóvenes y mostrando el gozo de servir a Cristo. Su lema de vida podría resumirse en las palabras de Juan 3:30: “Es necesario que Él crezca, pero que yo mengüe”.
El Pastor Collins es un ejemplo vivo de lo que significa ser un siervo fiel —alguien que ama, da, ora, sirve y persevera. Su historia inspira a todos los que desean rendir su vida completamente a Dios. Su fe sigue iluminando vidas, su testimonio sigue tocando corazones, y su amor por las misiones sigue extendiendo el Evangelio hasta lo último de la tierra.
Leer: Mateo 25; Proverbios 8
¿Qué representa el aceite en las lámparas de las vírgenes prudentes, y por qué crees que las insensatas no pudieron compartirlo?
