Día 32 | La Asombrosa Historia de un Dador Millonario

Día 32

La Asombrosa Historia de un Dador Millonario


Hace algunos años escuché habla a un hombre californiano llamado Steve en una conferencia cristiana, quién contó la historia sobre la manera ¡como él y su esposa se convirtieron en dadores millonarios!


Steve era dueño de un negocio pequeño y ganaba aproximadamente US$50.000 al año. Steve fue a una conferencia de Campus Crusade for Christ y escuchó como el Dr. Bill Bright retaba a todos en la audiencia a dar US$1.000.000 para la obra del Señor. Después del mensaje, Steve se acercó a hablar con el Dr. Bright y le pregunto, «¿Obviamente usted no quiso decir que mi esposa y yo deberíamos ser incluidos entre las personas que darán un millón de dólares para la obra del Señor?». El Dr. Bright le preguntó cuánto había ganado el año anterior. Steve respondió: «US$50.000». El Dr. Bright preguntó, ¿Cuanto le diste al Señor el año pasado? Steve respondió: «US$15.000». Steve pensó que el Dr. Bright se iba a impresionar de que el había dado más del 25% de sus ingresos para la obra del Señor. El Dr. Bright dijo, «Bueno, confía en que el año entrante Dios te va a permitir dar US$50.000». Pero Steve dijo, « ¡Ese es mi salario completo!» El Dr. Bright dijo, «Confía en Dios y si Él te proveerá los fondos; da US$50.000!».


Steve regresó a su casa y sorprendentemente le fue muy bien en su pequeño negocio. Él y su familia vivieron con el salario de US$50.000 y dieron US$50.000 para la obra del Señor. El siguiente año ellos se comprometieron por fe ante Dios y ante sí mismos a continuar viviendo con los US$50.000 y a tratar de dar US$100.000 para la obra del Señor, si Él se los proveía. Sorprendentemente, a través de unas circunstancias increíbles y de gran prueba de su fe ellos pudieron dar US$100.000 ese año.


Cada año, ellos seguían viviendo con el salario básico y daban sus ingresos extras para la obra del Señor. ¡Y lo crean o no, en menos de 5 años, ellos habían dado cerca de un millón de dólares para el Señor!



Algunas veces Dios aumenta nuestros ingresos 

no para elevar nuestro estándar de vida 

sino para incrementar el estándar de lo que damos.  


11 de Julio - LEER - Salmos 146-150 

El Señor es digno de alabanza, en Salmos 146 ¿qué son hechos y verdades que el Señor ha hecho por las cuales debemos dar alabanza?