Andando con Charles Finney
Charles Finney fue un predicador que Dios usó de una forma extraordinaria. En el otoño de 1821, un estudiante de leyes de veintinueve años de edad comenzó a buscar al Señor. Durante el pasado año un avivamiento se había extendido en su ciudad natal de Adams, Nueva York, y él se había rehusado a participar. Pero por curiosidad, comenzó a estudiar la Palabra de Dios por sí mismo a solas. Dios le convenció de su necesidad de la gracia de Dios y Su gran salvación. Finney recibió la salvación y a la vez un llamado de “abogar por la causa de Cristo”. (https://www.plough.com/en/topics/faith/discipleship/the-conversion-of-charles-finney)
El ministerio de Finney fue el comienzo del segundo gran avivamiento (alrededor de 1792-1835). Vivió en la época de la rápida expansión al Oeste, en que hubo un crecimiento de población sin precedentes. Los norteamericanos habían asimilado la doctrina del "Destino Manifiesto", y con ella el optimismo en los logros y el potencial humano único en la historia. Finney era la personificación espiritual de ese ideal.
Finney despreciaba la preparación formal. A veces era criticado por su estilo de predicación tajante y sentenciosa. Sin embargo, Dios le usó de una manera increíble.
Nada de lo que Finney logró en su vida hubiera sido posible sin la dirección y guía del Espíritu Santo. Dios no usa a personas con grandes talentos; Él usa a personas que estén dispuestas a ser usadas por Él. Finney tenía un gran fuego en sus huesos por compartir la Palabra de Dios y el evangelio con los perdidos a su alrededor.
Charles Finney también tuvo un gran amigo, al que llamaba su guerrero de oración, Daniel Nash. Él oraba fervientemente por los servicios de avivamiento; siempre estaba atrás del escenario orando e incluso murió orando.
Sin la oración intercesora y constante de su amigo Daniel, quizás muchas de las almas que fueron salvas bajo la predicación de Finney no lo hubieran sido.
El poder de la oración junto con la predicación de la Palabra de Dios es increíble. No nos cansemos de orar por otros y compartirles a otros las nuevas de salvación, pues Dios tiene mucho poder y quiere que nosotros vayamos a Él para pedirle de Su poder.
Dios quiere que obedezcamos y andemos en lo que Él nos ha mandado a hacer.
Video de hoy - https://youtu.be/vILI7MPqkbU
Leer Éxodo 7-9; Proverbios 1
Anotar algo único que nunca había dado cuenta antes en estos capítulos sobre las plagas.