La prosperidad de los impíos
¿Por qué viven los impíos, Y se envejecen, y aun crecen en riquezas?
Su descendencia se robustece a su vista, Y sus renuevos están delante de sus ojos.
Job 21:7–8
Job hace la pregunta que muchos hemos hecho. ¿Por qué gente que anda en pasos contrarios a la Palabra de Dios, tienen aparente prosperidad en sus vidas y negocios? Aunque la pregunta es fácil de hacer, realmente es mucho más difícil definirla por completo. Por ejemplo, ¿cómo definimos la prosperidad? ¿Cómo podemos saber si en realidad están contentos con su aparente éxito aunque estén lejos de Dios? ¿Cuánto es suficiente en la medida de las cosas?
John D. Rockefeller, el primer billonario de los Estados Unidos, es considerado el estadounidense más rico de toda la historia. Cuando falleció en 1937, sus bienes equivalían al 1.5 por ciento de la producción económica total de los Estados Unidos, una cifra alucinante—el hombre más rico de la tierra. En una ocasión, un reportero le hizo una pregunta “¿Cuánto dinero es suficiente?" Él tranquilamente respondió, "Solo un poco más”.
Es divertido a veces pensar lo que haría con mucho más dinero o con circunstancias diferentes en su vida personal. Pero en realidad la pregunta no es lo qué haría si fueran diferentes sus circunstancias, la pregunta es, ¿qué está haciendo con lo que Dios ha puesto en su vida actualmente? No pierda el tiempo soñando en cosas diferentes o comparándose con alguien que tiene circunstancias más favorables que las suyas. Más bien, sea intencional para ser un buen mayordomo donde se encuentra actualmente. Dios va a encargarse de dirigir su futuro.
Job tomó tiempo de hablar de la prosperidad de los impíos. En parte era para corregir la filosofía que por hacer lo malo, él estaba en problemas en su vida. Pero también es percibido como un reclamo porque él andaba en lo bueno, pero sus circunstancias no eran favorables. La circunstancias no necesariamente siguen nuestro andar, pero en cada momento, nuestro andar debe seguir a Dios y Su Palabra.
Leer Job 21-23; Proverbios 9
En Job 22:2, Elifaz pregunta ¿Traerá el hombre provecho a Dios? En el contexto de capítulo, ¿Que tan valida era esta pregunta? ¿Es cierto que nosotros no llevamos beneficio a Dios, sino solo a nosotros?