Mantengamos firme nuestra esperanza

“Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca”.

Hebreos 10:23-25


¡Qué privilegio tan glorioso es nuestra posición en Cristo! Por Su sangre preciosa, hemos sido completamente perdonados, justificados y acercados a Dios como hijos amados. Esta realidad inmutable nos da una base sólida para mantenernos firmes en nuestra confesión de esperanza, sin vacilar, porque Aquel que prometió es fiel y poderoso para cumplirlo. En medio de un mundo incierto y cambiante, nuestra identidad como redimidos nos ancla en la Roca eterna.


Esta firmeza no es solo personal; se expresa en la manera en que vivimos con los demás. Somos llamados a considerarnos mutuamente, a estimularnos al amor y a las buenas obras, a no abandonar la congregación y a exhortarnos con mayor intensidad mientras esperamos el regreso del Señor. Es en la comunidad cristiana donde crecemos en gracia y en el conocimiento de Cristo, animando a otros mientras también somos animados.


Una historia real que ilustra poderosamente esta verdad es la de la comunidad amish de Nickel Mines, Pensilvania, en el año 2006. Un hombre armado irrumpió en una escuela amish, tomó rehenes y asesinó a cinco niñas inocentes antes de quitarse la vida. En medio de un dolor inimaginable, las familias afectadas no respondieron con odio, sino con perdón radical. Horas después de la tragedia, miembros de la comunidad visitaron a la viuda y a los hijos del agresor para consolarlos y ofrecerles perdón. Incluso asistieron a su funeral y crearon un fondo para ayudar a su familia. Su posición como perdonados en Cristo les dio la fortaleza para mantenerse firmes en la gracia, y su comunidad se unió para animarse mutuamente en el amor y las buenas obras, transformando una tragedia devastadora en un testimonio vivo de esperanza que impactó al mundo entero.


Hoy, por su posición en Cristo, ¡usted puede mantenerse firme! No retroceda ante las pruebas; permita que esa esperanza inquebrantable lo impulse a buscar la comunión, a enviar una palabra de ánimo, a orar con un hermano necesitado. Al hacerlo, no solo crecerá usted en la gracia del Señor, sino que también ayudará a otros a crecer. Dios es fiel, y Su promesa se acerca. ¡Mantengámonos firmes juntos, llenos de esperanza y amor, hasta que Él venga!


Video de hoy: https://youtu.be/VSCaU5KQgJ4


Leer: Hebreos 7-10; Proverbios 22

¿Cómo se llama el lugar donde solo podía entrar el sumo sacerdote y que representaba?