Un Motivo para Alcanzar a los Perdidos


 

“Por tanto procuramos también, o ausentes o presentes, serle agradables. Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo. Conociendo, pues, el temor del Señor, persuadimos a los hombres; pero a Dios le es manifiesto lo que somos; y espero que también lo sea a vuestras conciencias”.

2 Corintios 5:9-11

 

Tenemos la certeza de que un día vamos a dar cuenta de nuestras vidas al Señor. Esto debería motivarnos a ser fieles a obedecer Sus mandamientos, incluyendo la instrucción final que dejó de: "Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura" (Marcos 16:15). Pero además de la obediencia, hay otro motivo para compartir el Evangelio, el conocimiento de que cada persona deberá estar ante la presencia de Dios sean salvados o perdidos.

 

Charles Spurgeon describió ese día de esta manera: "Si usted no ha mirado a Cristo en la cruz, usted tendrá que mirarle a Él en el trono, con gran temblor. La muerte sacrificial de Cristo será llevada ante los ojos de todos los que se niegan a aceptar Su regalo de perdón y vida eterna. En Belén, Él vino en misericordia para perdonar el pecado. En el futuro vendrá en las nubes de gloria para establecer justicia. ¿Qué vamos a hacer sin un Salvador? En el día del juicio no habrá nada que podamos hacer si no hemos confiado en Cristo".

 

La única esperanza de salvación se encuentra en la fe en Jesucristo. No hay otro camino al Cielo. Y el plan de Dios para que la gente escuche las Buenas Nuevas y sean salvos es que Sus hijos les digan. Este es un privilegio maravilloso, pero también es una gran responsabilidad. Recordando que el juicio viene, debemos hacer todo lo posible para alcanzar a los perdidos.


Principio de hoy para permanecer Arraigado: Cada persona que conoce hoy, un día estará delante de Dios. ¿Los ha advertido del juicio venidero?