Nos levantaremos y edificaremos

“Y en respuesta les dije: El Dios de los cielos, Él nos prosperará, y nosotros Sus siervos nos levantaremos y edificaremos, porque vosotros no tenéis parte ni derecho ni memoria en Jerusalén”.

Nehemías 2:20


Cuando Nehemías empezó a trabajar, la oposición no se hizo esperar. Sanbalat, Tobías y Gesem se burlaron e intentaron detener la obra. Pero Nehemías respondió con fe y convicción: “El Dios de los cielos, Él nos prosperará, y nosotros Sus siervos nos levantaremos y edificaremos”. Aunque había oposición, Nehemías, como un buen líder, no estaba dispuesto a dejar en pausa la obra del Señor.


Nehemías no discutió ni se justificó ante sus enemigos. Simplemente afirmó que el Dios de los cielos prosperaría la obra. Cuando enfrentamos oposición, recordemos que nuestro éxito no depende de la aprobación de la gente, sino del respaldo de Dios. El plan de Dios se llevará a cabo aun si la gente alrededor no entiende, se queja, se burla o critica lo que el Señor está haciendo.


Nuestra fe requiere acción. No basta con orar o esperar; también hay que actuar. La fe verdadera se acompaña de obediencia y trabajo constante. Eso fue lo que Nehemías enseñó al pueblo de Dios. Ofenderse o tomar las cosas de manera personal solo frena nuestro propio crecimiento espiritual. Mientras los enemigos intentaban ser un obstáculo y desánimo, un buen líder ayudaba a los suyos a encontrar ánimo y gozo en la obra de Dios, sabiendo que estaban haciendo su parte para ver fruto más adelante.


Nehemías marca una diferencia clara: los enemigos no tenían parte, derecho ni memoria en Jerusalén. Como hijos de Dios, tenemos una herencia espiritual que nadie puede arrebatarnos. El enemigo intentará desanimarnos, pero no tiene autoridad sobre el plan de Dios en nuestra vida.


Nehemías no permitió que las burlas ni las amenazas lo desanimaran. Él sabía Quién lo respaldaba y cuál era su misión. Muchas veces enfrentamos obstáculos y voces que quieren apagar nuestra fe, pero debemos mantenernos firmes en la visión que Dios nos ha dado.


Este día recuerde que, como hijos de Dios, tenemos una herencia espiritual que el enemigo no puede reclamar. Nada del plan de Dios puede ser arrebatado, destruido o abandonado, a menos que usted lo permita. De lo contrario, Él cumplirá Su propósito en nosotros. “¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?” Romanos 8:31 “Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo”. Filipenses 1:6


Video de hoy: https://youtu.be/-kH8cqXpjco


Leer: Nehemías 1-5; Proverbios 26

¿Cuáles fueron las indicaciones para tener cuidado con los enemigos?