Día 36 | Las provisiones creativas de Dios, conociendo a Dios como tu Proveedor

Día 36

Las provisiones creativas de Dios, conociendo a Dios como tu Proveedor

«De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan» (Salmos 24:1).

Uno de los más maravillosos descubrimientos que harás a medida que empieces a dar más fiel y generosamente para la obra del Señor en tu iglesia y más allá de ella, es la manera como Dios empezará a manifestarse en tu vida como tu proveedor de maneras únicas y creativas.

Aunque no soy partidario del evangelio de la prosperidad y de la religión de la salud y las riquezas que promueven algunos evangelistas en la televisión, he visto que las personas que honran a Dios con lo que dan experimentan las bendiciones de Dios de diferentes maneras. Debido a que la Biblia enseña claramente que Dios es el dueño de todo, Él puede ser muy creativo en lo que hace para suplir todas tus necesidades.

Permíteme compartir algunos versículos que han moldeado mi entendimiento y experiencia con respecto a las provisiones creativas de Dios:  

- Proverbios 13:22 «El bueno dejará herederos a los hijos de sus hijos; Pero la riqueza del pecador está guardada para el justo».  

- Eclesiastés 2:26 «Porque al hombre que le agrada, Dios le da sabiduría, ciencia y gozo; mas al pecador da el trabajo de recoger y amontonar, para darlo al que agrada a Dios. También esto es vanidad y aflicción de espíritu».

- Job 27:16-17 «Aunque amontone plata como polvo, Y prepare ropa como lodo; La habrá preparado él, mas el justo se vestirá,Y el inocente repartirá la plata».

- Isaías 45:3 «Y te daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados, para que sepas que yo soy Jehová, el Dios de Israel, que te pongo nombre».

En estos versículos y durante mi experiencia con el Señor he visto que muchas veces el Señor «transfiere» a los dadores fieles la propiedad de bienes que ellos requieren específicamente, sin costo alguno o con un ahorro significativo.

Muchas personas creen que sus necesidades son suplidas a través de sus salarios y no necesariamente por Dios; pero Dios puede usar el salario de una persona para suplirle varias necesidades. ¡Dios es más grande que un salario! Una empresa puede ser tu empleador, pero Dios es tu verdadero proveedor.

Te animo a orar y pedirle a Dios te guié a su provisión divina para suplir tus necesidades. Él puede decidir utilizar tu salario actual, ahorros, incrementos en tu salario, o te puede dirigir hacia el articulo particular que necesites y ayudarte a obtenerlo sin costo alguno o ahorrando significativamente.

15 de Julio - LEER - Proverbios 10-12 

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