Pidiendo con fe
“Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. No piense, pues, quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor”
Santiago 1:5-7
Cuando Hudson Taylor iba a China para comenzar su obra misionera, su barco estuvo en gran peligro. El viento se había calmado, y la corriente los estaba llevando a un arrecife escondido. Todo lo que intentaron falló. En su viaje, Hudson Taylor apuntó lo que sucedió momentos después: “El capitán me dijo, Bueno, hemos hecho todo lo que podíamos. Me llegó un pensamiento y le contesté, No, no hemos hecho todo lo que podemos aún. ¿De qué estás hablando? me preguntó. Hay cuatro cristianos en el barco. Vamos cada quien a su cuarto y oremos al Señor para que nos de algo de brisa”.
Taylor oró por un momento, y después, seguro de que la respuesta vendría, subió a la cubierta y le pidió al oficial que bajara las velas. “¿Qué tendría de bueno eso?” preguntó ásperamente. Le dije que le habíamos pedido a Dios por algo de viento; y que venía inmediatamente. Después de algunos minutos el viento comenzó a soplar otra vez, y los llevó a salvo lejos del arrecife. Taylor escribió, “Así me dio fortaleza Dios mientras aterrizaba en la cosa de China para traerle cualquier cosa en oración a Él, y esperar que el honraría el nombre de Jesucristo y que estaría ahí para ayudar en todas las emergencias”.
Sabiendo que nuestras oraciones pueden alcanzar el corazón de nuestro Padre Celestial y que el puede cumplir toda necesidad, debemos de tener confianza en que Él va a escuchar y contestar cada vez que clamamos a Él.
Principio de renovación de hoy: Cuando oramos con confianza, honramos a Dios y demostramos que nuestra fe es real.
27 de octubre - LEER - Lucas 10-11
Cuando los setenta testigos regresaron, Jesús les dijo que no deben regocijarse sobre el poder que habían visto. En vez de eso ¿sobre qué deben regocijarse?